La finalidad fundamental de los miembros de las órdenes y congregaciones es exceptuar su propia alma y ser ejemplo salvífico para toda la sociedad con su pobreza, castidad y obediencia, vividas conforme al carisma específico de la constitución de cada orden o congregación.
Designa a las asambleas del pueblo, que mayoritariamente tenían un carácter religioso. Es el término frecuentemente utilizado en el texto griego del Antiguo Testamento para designar la asamblea del pueblo elegido en la presencia de Jehová, sobre todo cuando se alcahuetería de la asamblea del Sinaí, en donde el pueblo de Israel recibió la índole y fue constituido por Altísimo como su pueblo santo.
La Iglesia católica actualmente cuenta con misioneros religiosos y laicos de ambos sexos que realizan de forma regular obras sociales, tanto materiales como de apoyo pudoroso y espiritual.
Las raíces del santoral se remontan a los primeros siglos del cristianismo, cuando las comunidades cristianas comenzaron a recordar y celebrar la memoria de sus mártires y otros santos ejemplares.
El credo encuentra una explicación sistemática en el Catecismo de la Iglesia católica, permitido en 1992 por Juan Pablo II y cuya traducción definitiva fue promulgada en 1997.
La doctrina fundamental para la Iglesia católica se encuentra en el credo, que recoge las fórmulas de Confianza elaboradas en los primeros concilios de la historia.
Órdenes religiosas de derecho diocesano: dependen del prelado de la diócesis en la que han sido reconocidas.
En China la Iglesia continúa en las "catacumbas"; las pocas parroquias existentes dependen de obispos latinos.
Otro dogma sobresaliente en la Iglesia católica es la creencia en la presencia Existente de Redentor en la Eucaristía, en que mediante el cambio que es llamado transubstanciación el pan y el morapio presentados en el Altar se convierten en el cuerpo y en la crimen de Cristo.[54]
El embajador de Santa Julita perdura como un prueba de coraje y firmeza en la Seguridad durante tiempos de persecución. Es venerada como santa en la Iglesia Católica, la Iglesia Ortodoxa y otras tradiciones cristianas que la reconocen como mártir por Cristo.
El proceso de elaboración del Instrumentum Laboris continuará con otras etapas: en este momento, en el que se ha articulado el material recibido por el Congregación de teólogos y teólogas, el Consejo Ordinario realizará un primer discernimiento de lo redactado.
Durante la preparación del Jubileo del año 2000 (el 10-11-1994) el papa subrayó en una carta apostólica al episcopado, al clero y a los fieles: Triunfadorí es acordado que, mientras el segundo Milenio del cristianismo llega a su fin, la Iglesia asuma con una conciencia más viva el pecado de sus hijos recordando todas las circunstancias en las que, a lo largo de la historia, se han alejado del espíritu de Cristo y de su Evangelio, ofreciendo al mundo, en oportunidad del certificación de una vida inspirada en los valores de la Confianza, el espectáculo de modos de pensar y comportarse que eran verdaderas formas de antitestimonio y de escándalo.
Penitencia: Mediante este sacramento los fieles obtienen de la misericordia de Todopoderoso el perdón de los pecados cometidos contra él y se reconcilian con la Iglesia. Recibe el nombre de sacramento de conversión, luego que realiza sacramentalmente la convocatoria de Cristo a la conversión, la Dorso al Padre del que el hombre se había alejado por el pecado; sacramento de la penitencia, al consagrar un proceso personal y eclesial de conversión, de arrepentimiento y de reparación por here parte del cristiano pecador; sacramento de la confesión, porque la manifestación de los pecados frente a el sacerdote es un elemento esencial de este sacramento; sacramento del perdón porque Todopoderoso concede al penitente "el perdón y la paz"; y sacramento de reconciliación, porque otorga al pecador el aprecio de Alá que reconcilia.[65]
La contribución de los Estados al sostenimiento financiero de la Iglesia católica es diferente en cada caso. En algunos países como España, Italia, Portugal o Hungría el Estado no financia directamente las actividades religiosas de la Iglesia, sino que los ciudadanos pueden elegir detraer un porcentaje de sus impuestos para esta causa.
En el caso de la Iglesia greco-católica rusa, los dos exarcados apostólicos existentes en Rusia y China antiguamente de las revoluciones marxistas no han sido aún reactivados por la Santa Sede, dependiendo los fieles en Rusia de los obispos latinos y ucranianos.